Cuando te vas de viaje, quieres llevarte media casa. Es inevitable porque no sabes el tiempo que va a hacer, porque quieres llevarte libros, tableta, móviles, juegos, etc. Siempre tienes de más en una maleta y claro, luego pasa que no te entra todo.
Si además viajas en avión, sabes que, si la maleta pesa mucho o es grande, toca facturar, y eso quiere decir gastar más. Por eso, muchos viajan con maletas de cabina (al menos hasta que empiecen a cobrarlas).
Por eso, ¿qué tal si te damos algunos trucos para que puedas meter todo sin desesperarte?
1. Enrolla. La ropa, cuando la enrollas, no se arruga, y además ocupa menos espacio que si la doblas y la metes en la maleta. Haz la prueba. Ahora bien, si tu ropa es grande, a veces es mejor extenderla en la maleta e ir doblando después de varias capas porque cabrán más cosas.
2. Usa bolsas al vacío. Es otra opción, compras unas bolsas al vacío, metes toda la ropa y empiezas a quitarle el aire para que se haga más pequeña y fina. Se mantendrán sin arrugas y eso conseguirá que te puedas llevar más ropa.
3. Los botes. Cuidado con ellos, lleva solo los imprescindibles porque, al fin y al cabo, en el avión te los pueden quitar, y donde vayas siempre habrá algún sitio donde puedas comprarlos.
4. No dejes huecos. Los huecos puedes rellenarlos con ropa interior, accesorios, o lo que se te ocurra. Lo importante es que todo esté en su sitio y quede bien.
5. Recuerda que debe quedar espacio. Es una recomendación que te hacemos porque siempre que vamos de viaje nos traeremos algo de recuerdo. Así que, en la medida de lo posible, haz que quede espacio en la maleta por lo que pueda volver.