Para los amantes del turismo aventurero y los sitios que nadie se atreve a visitar, hay una ciudad en China que seguramente les fascinará. Lo curioso es que esta no es una ciudad cualquiera, sino una ciudad sumergida bajo las profundidades de un pozo y que alberga cientos de misterios en torno a su creación e inundación. Su nombre es Shi Cheng, aunque también se le conoce como ‘La Ciudad León’, y está entre 26 y 40 metros por debajo del Lago Qindao o Lago de las Mil Islas, en la provincia de Zhejiang. Se ubica como una de las locaciones turísticas más emblemáticas y populares del continente asiático, y acá te contamos más sobre la misma.
Shi Cheng antes de pasar a ser una ciudad sumergida
Si bien no se tiene una fecha específica respecto a cuando se fundó exactamente, los registros históricos estiman que su instauración tuvo lugar hace poco más de 1300 años. Por aquel entonces reinaba la antigua Dinastía Han en toda China, por lo que es normal encontrarse con vestigios de esta dinastía en las profundidades del Lago Qindao. También hay figuras talladas de animales mitológicos y un antiguo arco que se cree pertenece a la dinastía Qing.
Desde entonces conserva un sinfín de elementos que le ubican como una de las regiones más bonitas, y sin duda una de las más misteriosas, de toda China. El descubrimiento de la ciudad sumergida tuvo lugar hace varios años atrás, cuando un equipo de buzos nadaba por las aguas del Qindao y vislumbraron los restos de lo que parecían antiguas edificaciones. Al sumergirse un poco más descubrieron que efectivamente estaban ante las ruinas de una ciudad que llevaba décadas bajo las aguas.
¿Cuándo pasó a ser ‘ciudad sumergida’?
La mayoría de las personas suele atribuir la causa de inundación a algún fenómeno natural. Pero la verdadera razón por la cual Shi Cheng es una ciudad sumergida es que esto se realizó de manera intencionada. Sin embargo, no fue bajo motivos perjudiciales ni mucho menos, sino que el Gobierno chino tomó la decisión de inundarla para construir allí cerca una central hidroeléctrica que surtiera agua a las ciudad de Hanghou y Shangái.
Por lo tanto, de manera unánime se tomó la decisión de hundir a Shi Cheng con un lago artificial en el que abundan pequeñas islas a su alrededor. Sin embargo, las razones iniciales por las que se instauró dicha central quedaron sin efecto varios años después y se determinó que dejaría de funcionar como fuente hidroeléctrica a las regiones aledañas. Pero lejos de que ello significara un fracaso, los gobernantes chinos detectaron en la zona un increíble potencial turístico que se han dedicado a explotar fervorosamente desde entonces. Por ello se ha situado como una de las regiones más visitadas por los viajeros, tanto nacionales como extranjeros.
Dimensiones de Shi Cheng
Es una ciudad de tamaño que va de mediano a grande, puesto que alberga tan solo 573 kilómetros cuadrados. Llama la atención que pese a la presión que ejerce el agua sobre sus antiguas edificaciones, las mismas aún logran mantenerse en perfecto estado y sin signos visibles de deterioro. Pocos turistas se atreven a formar parte de esta aventura submarina, puesto que no todo el mundo está apto para vivir de cerca una experiencia tan fascinante pero a la vez aterradora. Quienes si se han atrevido a hacerlo destacan que la ciudad sumergida de Shi Cheng es una especie de viaje en el tiempo que permite a los turistas formar parte de una experiencia mágica e inolvidable.
Destaca también la modernidad que se contempla sobre su superficie, donde destacan todos los elementos modernos de la actualidad. Mientras que bajo las aguas te encuentras con ruinas que tienen más de 1000 años asentadas allí, siendo claros vestigios de una antigua dinastía y un pueblo tradicional chino. Entre los lugares de interés por visitar si vas a bucear por la zona, se encuentra la puerta de entrada a la ciudad y las figuras alusivas a criaturas mitológicas propias de la cultura china.
Elementos destacados de la ciudad
Entre el agua turbia de Shi Cheng podrás vislumbrar una serie de elementos que vale la pena mirar en persona, tales como el dragón enroscado que da la bienvenida a la ciudad y una criatura híbrida llamada ‘quilin’. También te encontrarás pergaminos, libros y pabellones, así como inscripciones talladas sobre las reglas que debían seguir las mujeres en la China feudal. Los buzos también descubrieron una zona residencial en la que pocas cosas de la ciudad conservaban sus techos pero si mantenían fachadas intactas pese al paso de los años y los efectos del agua sobre las construcciones.
¿Sólo se puede recorrer bajo el agua?
Allí radica otro de los grandes atractivos de la ciudad sumergida de Shi Cheng, puesto que ofrece la alternativa de conocerle tanto por encima como por debajo del agua. Tal parece que los funcionarios de turismo del Gobierno chino que decidieron inundar la ciudad con el lago artificial se adelantaron a los hechos y sabían que en caso de no funcionar la idea de la represa, el sitio podría ser utilizado como recurso turístico.
Si le temes a las aguas o simplemente no quieres bajar a las profundidades del Lago Qindao, no te preocupes, las aguas del lago son tan cristalinas que también tendrás la oportunidad de ver las ruinas de la ciudad desde la superficie. Pero claro, si buscas una experiencia más realista, lo mejor será que te sumerjas en sus aguas. No tienes que hacerlo solo, puesto que en la región hay equipos de buzos profesionales dispuestos a llevarte a vivir tal experiencia y evitar que ocurra alguna tragedia. Aunque debes tener en cuenta que la temperatura anual del agua oscila entre los 10 y los 20 grados, así que probablemente termines un poco entumecido de frío en tu recorrido submarino.
La ciudad sumergida de Shi Cheng contempla una experiencia de viaje maravillosa e inolvidable. Cualquier turista en el mundo merece formar parte de ella, bien sea haciendo recorridos superficiales o submarinos. No hay lugar a dudas de que se erige como una de las zonas más extraordinarias por conocer en el continente asiático.
